ETF: Todo lo que necesitas saber

El primer ETF surgió en 1990 en Canadá. Desde entonces, este tipo de instrumentos se fue posicionando como una alternativa muy efectiva para todo tipo de inversores. ETF viene de la sigla en inglés Exchange Trade Fund, se traduce al español como fondo cotizado. Estos instrumentos, explicado de forma muy sencilla, son fondos de inversión, con la característica de cotizar en bolsa y están al acceso de todos. 

Si buscas la libertad financiera, te recomiendo que leas el siguiente articulo: Finanzas personales: ¿Cómo lograr la libertad financiera?

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Como dijimos más arriba, son fondos de inversión que cotizan en bolsa, por lo tanto dentro de estos fondos, existen distintos instrumentos cotizados como acciones, bonos, materias primas u otros instrumentos. Para explicarlo de otra manera, imaginemos un “equipo de fútbol” con “once jugadores”. El equipo representa al ETF y cada jugador representa un activo. 

Su funcionamiento es similar al intercambio de acciones, se compran y se venden durante la sesión bursátil.

Estos fondos cotizados la mayoría de las veces están orientados a replicar algún sector, ya sea bancario, energético, tecnológico, o seguir los movimientos de algún índice como SP 500, el Nasdaq o Dow Jones.

Con el paso de los años, la ingeniería financiera se complejiza cada vez más. Por consecuencia de este avance, surgen los ETFs Inversos. Esto significa que si compramos uno de estos, significa que esperamos que el precio del activo subyacente caiga. Por ejemplo, el QQQ (Invesco QQQ Trust Series 1) sigue los movimientos del Nasdaq. 

Si compramos SQQQ (ProShares UltraPro Short QQQ ETF) esperamos que el Nasdaq descienda su precio. Al tratarse de un ETF inverso, estaríamos “ganando”. Por el contrario, si el Nasdaq sube, nuestra posición en SQQQ se movería a la inversa.

Estos fondos apalancados, tienen las mismas características que un ETF normal o inverso. La diferencia que tienen, es que al ser instrumentos apalancados, los rendimientos o pérdidas se multiplican. Por ejemplo, UDOW (ProShares UltraPro Dow30), sigue el movimiento del índice Dow Jones, pero está apalancado x3. De esta manera, si el Dow sube 1%, nuestra posición en UDOW, subiría un 3%. De la misma manera, si el precio del índice baja 1%, nuestra posición perdería el 3%. 

Si bien, los rendimientos pueden multiplicarse, hay que tener en cuenta que las pérdidas también. Por lo tanto, si decidimos invertir en estos, tenemos que tener en cuenta que la volatilidad y el riesgo son elevados, por esto no se recomienda invertir sin tener la experiencia y el conocimiento necesario. 

Además de cotizar en bolsa y ser accesibles, otra de las ventajas que presenta invertir en este tipo de fondo de inversión, es que nos permite diversificar nuestro portafolio en distintos “sub activos” en uno solo. 

Al diversificar dentro de un sector, estamos comprando “un montón de acciones de distintas empresas” en un solo instrumento. Al hacer esto, evitamos exponernos a la volatilidad de unas pocas empresas.

Las empresas que emiten estos instrumentos, están obligadas a ser transparentes, y todo el tiempo sabremos en que está invertido el dinero y en qué proporción.

Otro de los puntos fuertes, es el bajo costo de operación. Al comprar una participación en un fondo privado, las comisiones por gestión suelen ser bastante más altas al 0.5% o 0.8% que se suele cobrar por la participación en un ETF.

Si estas empezndo a invertir, podes leer: Inversion: Primeros pasos

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• Liquidez: que haya liquidez de un mercado, significa que siempre hay compradores y vendedores dispuestos a operar. Esto no pasa con todos los instrumentos, incluso con los fondos privados.
• Diversificación: Nos permiten disminuir el riesgo y la volatilidad, reduciendo la posibilidad de pérdidas grandes. 
• Comisiones: los gastos de gestión son más bajos que los de un fondo de inversión común o privado. permitiéndonos tener mayores beneficios a largo plazo.
• Flexibilidad: Podemos comprar y vender durante toda la sesión bursátil. Cada vez que abramos una operación de compra o venta, se ejecutará al instante.
• Transparencia: Las empresas que se dedican a la cotización de fondos, están obligadas a mantener a los inversores informados en qué instrumentos y en que proporción está invertido el dinero. 

Más arriba mencionamos que estos instrumentos pueden estar orientados a replicar precios o seguir sectores. Ahora vamos en más detalle, a mencionar los tipos que existen:

• Renta Variable: Estos se centran en seguir movimientos de un índice, por ejemplo, el VOO de Vanguard, busca replicar los movimientos del SP 500, o el QQQ de Proshare que sigue al índice Nasdaq.
• Renta Fija: Los activos que manejan estos fondos, son deuda. Pueden ser bonos estatales, provinciales. También pueden estar orientados a deuda privada, bonos emitidos por distintas empresas.
• Selección Activa: En estos, se selecciona activamente, después de analizar aspectos técnicos y fundamentales, por ejemplo las mejores 50 empresas del DOW
• Materias primas: Se centran en invertir en empresas de un determinado sector ligado a la ganadería o metalúrgica. Es la forma más sencilla de invertir en oro, plata, maíz, o soja. 
• Regionales: según el gestor del fondo, las inversiones pueden enfocarse en una región determinada, América latina, Europa, Asia, Países desarrollados, subdesarrollados o emergentes. Estaríamos invirtiendo en las empresas de una determinada región con características similares.
• Globales: Estos invierten en renta fija o variables, pero a nivel mundial. Los más conocidos son los fondos manejados por Ishares

Si bien no hay una receta justa para armar un portafolio de ETFs, hay varios factores que aplican a todo el mundo. 

Primero debemos establecer nuestros objetivos, inversión a corto, mediano o largo plazo. 

Segundo, necesitamos ser conscientes del riesgo al que estamos dispuestos a exponernos. No es lo mismo invertir en países subdesarrollados que invertir en el Standard and Poor 500. Los beneficios no serán los mismos, pero tampoco las pérdidas en caso de haberlas.

Por lo que si somos algo principiantes en esto de los ETFs, te aconsejo armar tu cartera en base a índices en un principio. Por ejemplo, VOO, de Vanguard, sigue al SP500, y lo hace de muy buena manera. Luego, algunas posiciones en fondos orientados al consumo masivo, (estos generalmente pagan dividendos, no mucho, pero lo hacen). Más adelante empezar a abrir pequeñas posiciones en materias primas, (en estos momentos de inflación, imagino que seguirán subiendo). Y por último agregar deuda, pero de empresas grandes e importantes. No te recomiendo la deuda de países emergentes, si bien los rendimientos son mayores, los riesgo también lo son. Esto ya queda a tu criterio. 

Ahora viene la parte en la que debemos trabajar un poquito. A la hora de elegir un ETF o fondo para invertir, debemos evaluar algunas cosas.

Si buscamos un fondo que replique los movimientos del SP500, debemos corroborar a lo largo del tiempo que realmente se haya comportado de igual manera. De esta forma, podemos saber que la gestión, está bien hecha.

Luego, necesitamos corroborar que nuestra “bolsa de acciones” tenga lo que realmente dice tener. Si nuestro elegido dice seguir SP500, dentro no deberíamos encontrar empresas que no pertenezcan al índice. Esto nos muestra la transparencia y la fiabilidad de la empresa gestora del fondo.

Después, necesitamos saber qué gastos de comisión implica. No es lo mismo pagar 0.2% en gasto de gestión, que pagar 1%.

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Espero que este articulo sea de utilidad y pueden entender un poquito mas sobre esta alternativa de inversion.

Saludos.